Estados Unidos es una nación peculiar, de que es la nación de las libertades no queda duda, y sus derechos fundamentales se basan en la denominada “Bill of Rights” o sencillamente Carta de Derechos estadounidense, sin embargo la reciente matanza en Uvalde, Texas, en que murieron 21 personas, entre ellas, 19 niños y sus dos maestros de escuela, nos muestra una situación recurrente en ese país, que debería a estas alturas, llevar a las autoridades estadounidenses a decidir la reforma o derogación de la Segunda Enmienda a la Constitución de los Estados Unidos de América que brinda protección al derecho ciudadano de poseer y portar armas.
Es también la nación de los Rambos, cowboys y la mafia, en la cual el uso de armas tiene libertad absoluta, un ciudadano puede poseer armas de guerra en forma irrestricta, desde una ametralladora a un avión de guerra, prácticamente bastando sus posibilidades económicas que como es lógico son abundantes, pero la combinación con los antecedentes de su población resulta nefasta; representó una sorpresa tanto para alemanes como a japoneses el denuedo y valentía de los soldados americanos, supuestamente reblandecidos por una vida llena de lujos y comodidades, el ser así resulta ser consecuencia de los mismos antecedentes.
La defensa de sus derechos está bien compenetrada con el pueblo de los Estados Unidos, tan es así que ningún poder político federal ha podido eliminar esta enmienda y hasta en dos ocasiones la respetadísima Corte Suprema también defendió su vigencia, reforzada por los acontecimientos de setiembre del 2001 que le dio a Estados Unidos la calificación de país vulnerable por los atentados terroristas que removieron a la sociedad norteamericana luego del ataque de Al Qaeda en las Torres Gemelas de Nueva York y en el Pentágono; la población, principalmente joven, decidió adquirir armas de fuego y así la enmienda recuperó popularidad; la tenencia de armas con los años se ha vuelto incontrolable y los asesinatos como el más reciente se repiten en forma también incontrolable; es un tema que ya empieza a tener peso en la opinión pública, habiendo sido debatido en las elecciones presidenciales de 2016 y también en las de 2020 en las cuales Donald Trump, defendía a brazo partido la enmienda mientras Hillary Clinton y posteriormente Joe Biden, buscaban su abolición; las masacres con armas de fuego en EE.UU. no han podido ser neutralizadas, esa es una realidad trágica que revela profundos traumas en la población norteamericana; paradójicaente en su vecino país, Canadá, no existe dicho trauma.
El llamado “Club del rifle” en Estados Unidos defiende este derecho; hasta hace algunos años su presidente fue el popular y querido actor Charlton Heston, es una institución respetada que la semana pasada estuvo de aniversario; aun así la anotada enmienda debe ser derogada y deben aumentar los controles o chequeo de antecedentes propuestos por Barack Obama, el riesgo seguirá siendo la presencia de desequilibrados mentales, émulos de Rambo y sedientos de sangre; sin embargo el Senado ya ha bloqueado una iniciativa en ese sentido.
01/06/22